Des-ayunar sabiamente: la clave para una buena salud
Cuando hablamos de des-ayunar, estamos refiriéndonos a romper el ayuno nocturno con alimentos de baja carga digestiva pero de alto valor nutricional.
Esto tiene como objetivo facilitar que el organismo pueda continuar con los procesos de eliminación que suceden en este período de tiempo.
En la mañana, el cuerpo está en una fase de eliminación de toxinas. Esta fase dura hasta las 12-14hs. más o menos.
Por eso es importante no cortar esta fase con alimentos que tengan una alta carga digestiva. Así podremos favorecer la eliminación de toxemia.
Des-ayuna con alimentos saciantes y ligeros como las frutas.
Integrar el hábito de des-ayunar tiene el enorme poder de incrementar tu calidad de vida en muy poco tiempo.
Pero como todo hábito, al principio puede resultar un poco trabajoso de incorporar en nuestro día a día, y por eso te animamos a que te marques metas reales.
Tips para integrar un des-ayuno saludable
Te proponemos a continuación algunos tips que pueden servirte de ayuda para integrar este hábito en tu día a día:
- Comienza des-ayunando, es decir, rompiendo el ayuno nocturno con frutas solamente, un día a la semana.
- Puedes optar entre saciarte de frutas ácidas solas, como mandarinas, frutos rojos,etc., o prepararte un bol de frutas dulces.
- Elige hasta tres frutas para tus combinaciones: pera, mango, manzana, papaya, plátano, etc, o sólo una de ellas.
- Los zumos de fruta fresca son también una excelente opción.
- Espera a que te entre hambre y sáciate sin remordimientos.
- Continúa comiendo fruta hasta la comida principal.
Cuando integres el hábito de des-ayunar un día a la semana, pasa a dos días, y luego a tres… y así hasta que forme parte de tu vida, como cualquier otro hábito.
Cuando te quieras dar cuenta, el cuerpo te pedirá esa increíble ración de nutrientes tan necesarios para nuestras células, y tu nivel de energía habrá aumentado exponencialmente.
El resto de días que continúes con tus desayunos habituales, para rebajar la carga digestiva prueba a no echarle mantequilla a la tostada, sino aguacate y tomate; el bol de cereales con leche, sustitúyelo por leche vegetal con avena y frutos rojos, etc.
Son solo unos ejemplos pero hay miles de combinaciones que nos ayudarán a recuperar la vitalidad y mejorar nuestra salud.
Sin duda alguna el hábito de des-ayunar cambiará tu vida cuando aprendas a integrarlo, ya que notarás sus beneficios muy rápido y ya no querrás volver a esos desayunos pesados y desvitalizantes.